INICIO » » No te dejaré ir hasta que me bendigas

No te dejaré ir hasta que me bendigas

Es necesario que todos tengamos un encuentro
cara a cara con el Señor, para ser transformados

Título: No te dejaré ir hasta que me bendigas
Base Bíblica: Génesis 32:22-32

Introducción:

La experiencia que tuvo Jacob con el Señor fue transformadora. Era necesaria pero, además, en medio de las situaciones que vivía, algo inevitable: Un encuentro cara a cara con Dios. Ese tipo de encuentros es decisivo, porque nos llevan al cambio. Encontrarnos cara a cara con el Señor, no hoy sino siempre, traerá cambio a  nuestra existencia en todas las áreas de nuestra vida. Hoy es el día para emprender ese proceso de crecimiento, teniendo en cuenta que no podemos seguir en una etapa de estancamiento personal y espiritual.


I. Es necesario buscar a Dios cuando nos asaltan las crisis y tiempos de soledad (vv. 22, 23)

1. Todos necesitamos hacer un alto en el camino cuando atravesamos períodos de crisis, tal como lo hizo Jacob (v. 22)

2. Enfrentar las crisis—en la mayoría de los casos—parte de tomar tiempo a solas para hablar con Dios (v. 23)

3. En tiempos de crisis y de soledad se abren puertas para experimentar un encuentro con Dios

II. Un encuentro con el Señor nos transforma para siempre (vv. 24, 25)

1. Uno de los momentos más maravillosos del ser humano es cuanto tiene un encuentro con el Señor (v. 249
            a. Un encuentro con el Señor siempre resulta transformador
            b. Un encuentro con el Señor marca un antes y un después en nuestra         vida
            c. Un encuentro con el Señor, como ocurrió con Jacob, prueba que las experiencias con Dios no tienen por qué ser fugares

2. Un encuentro como el que tuvo Jacob con el Señor fue decisivo porque imprimió un cambio en su vida

III. Un encuentro con el Señor nos permite recibir bendiciones (vv. 26-29)

1. Jacob perseveró delante del Señor, decidido a recibir la bendición (v. 26)

2. El encuentro de Jacob con el Señor le permitió desarrollar intimidad con Él (v. 27)

3. Como ocurrió con Jacob, un encuentro con el Señor nos lleva a nuevos niveles en lo personal y espiritual (vv. 27, 28)
            a. Jacob entró en la dimensión de Dios
            b. Jacob fue asignado a una nueva misión
            c. Jacob fue transformado en padre de multitudes

4. En el encuentro con Dios, Jacob desarrolló sus potencialidades de vencedor (v. 28)

5. Si perseveramos, obtenemos las bendiciones de Dios (v. 29)

IV. ¿Ya tuvo usted un Peniel, que es un encuentro con Dios? (vv.30-32)

1. Todos los seres humanos necesitamos un Peniel, que es un encuentro con Dios (v. 30)

2. Después del Peniel—un encuentro con Dios—nuestra vida jamás será igual, como ocurrió con Jacob (vv. 31, 32)

Conclusión:

En mayor o menor medida todos los seres humanos atravesamos por períodos de crisis y de soledad que deben llevarnos a una cuidadosa auto – evaluación. ¿En qué estamos fallando?¿Qué cambios debemos imprimir a nuestra vida espiritual? Es un proceso maravilloso porque siempre está orientado al crecimiento personal y espiritual, pero sólo es posible, cuando ese encuentro de cara a una auto – evaluación, es delante del Señor, en Su Presencia. Dios nos revela en dónde debemos aplicar modificaciones y qué áreas debemos fortalecer. Es en esencia, un paso ineludible hacia nuevos niveles, nuevas dimensiones. ¿Tuvo usted ese encuentro con Dios, ese Peniel que es fundamentalmente personal entre usted y Él? No deje pasar esta oportunidad.

© Fernando Alexis Jiménez

OTROS TEMAS DE INTERÉS
2. Altar Familiar: Pensando como ganadores
4. Bosquejos para Sermones:  La protección de Dios

0 comentarios:

© Fernando Alexis Jiménez
Contacto: (0057)317-4913705
Email: webestudiosbiblicos@gmail
. Con la tecnología de Blogger.

SÍGUENOS EN FACEBOOK