Quien nos ayuda en el proceso de crecimiento es Dios mismo |
Título: El poder transformador del amor de Dios
Base Bíblica: Juan 14:15; 15:13; 1 Juan 4:16; Hebreos
12:5-11
Introducción:
Uno de los más grandes problemas para el ser humano es
que no ha conocido en su plenitud lo que significa el amor de Dios, y menos
aún, la forma como debemos corresponder a ese amor. Cuando llegamos a conocer a nuestro amado
Padre celestial, en su verdadera dimensión, realmente podemos serle fieles
cumpliendo lo que nos ha mandado—no por obligación—sino porque nace en nuestro
corazón corresponder a Su infinito amor. Recuerde que Dios desea que seamos
fieles, y es nuestra respuesta al amor que Él nos ha mostrado.
1. El distintivo característico del cristiano es el amor
(1 Juan 4:16)
a. Dios es amor
b. Debemos conocer
el amor de Dios
c. Permaneceremos en Dios si permanecemos en el amor
2. La mayor muestra del amor de Dios fue
enviar a Su Hijo Jesús a morir por nuestros pecados (Juan 3:16; 15:13; Romanos
5:8)
3. Mostramos amor a Dios cuando guardamos sus
mandamientos (1 Juan 5:3)
4. El amor es el vínculo entre Dios y el
hombre
II. El hombre
corresponde al amor de Dios con fidelidad
1. Si deseamos caminar en el temor de Dios,
correspondiendo a Su amor, debemos imprimir cambios a nuestra vida (1 Pedro 3:10-12; Juan 12:25)
2. Guardar Su Palabra y Sus mandamientos
testimonio nuestro compromiso con Dios (Juan 14:15, 23, 24)
a. El cristiano debe disciplinar su vida
b. El cristiano debe renunciar a la mundanalidad
3. Por su misericordia Dios perdona nuestros
pecados e inclinación al mal (Romanos 6:23)
4. El Señor Jesús enseñó que una demostración
de nuestro amor a Dios es hacer Su voluntad (Juan 6:38; Hebreos 5:8)
III.
Corresponder al amor de Dios nos lleva a vivir en una nueva dimensión
1. El Señor Jesús fue ejemplo de sometimiento
a la voluntad de Dios (Juan 12:48-50)
2. La Palabra de Dios debe anidar en nuestro
corazón (Deuteronomio 6:6, 7)
3. Dios nos guía para que caminemos conforme
a Su voluntad (Salmo 34:11; Cf. Hechos 9:31)
4. Dios trata nuestra vida para llevarnos a
un mayor grado de compromiso y fidelidad (Hebreos 12:5-11)
Conclusión:
Dios nos llama a experimentar transformación. Su amor
imprime cambios en nuestra forma de pensar y de actuar. Cuando somos
conscientes de la nueva vida que nos ofrece, comenzamos a caminar en Su
voluntad más que por cualquier otra cosa, para retribuir Su amor. Podemos ser
fieles, nada impide que lo logremos, pero se debe –ante todo—reconocer que si
Dios es Santo, nosotros por Su infinito
amor, debemos también ser santos, comprometidos, fiel a Sus mandatos.
© Fernando Alexis Jiménez
0 comentarios:
Publicar un comentario