El estancamiento espiritual en la vida del cristiano

El estancamiento espiritual en la vida del cristiano

El estancamiento espiritual no se produce de la noche a la

mañana... Es necesario revisar si nos hemos ido

desprendiendo de la mano de Dios...

Título: El estancamiento espiritual en la vida del cristiano

Base Escritural: 2 Reyes 16:1-20

Introducción:

Se ha preguntado alguna vez: ¿Cuándo se produce el estancamiento en nuestra vida espiritual? A todos nos ha ocurrido. Son períodos difíciles. Algunas veces, breves  y otras, muy prolongados. Ni siquiera cuando oramos pareciéramos encontrar sosiego. Todo pierde sentido. Hay quienes sienten que Dios está muy lejos de sus vidas. ¿Vivió una situación así?¿Quizá está atravesando por una de estas etapas? Si es así, llegó la hora de hacer un alto en el camino y pedirme a Dios que nos fortalezca para remprender el camino y seguir adelante.

I. CUANDO ADOPTAMOS PRINCIPIOS DEL MUNDO QUE NOS RODEA (vv.2-4)

1. Cuando por temor al qué dirán adoptamos principios  del común (v.2)

2. Cuando por temor al qué dirán adoptamos prácticas del común (v. 3)

3. Cuando deliberadamente transgredimos los preceptos de Dios (v. 4)

            a. El pecado es sutil

            b. El pecado atrae

II. CUANDO PROFANAMOS LO CONSAGRADO A DIOS (vv.5-10).

1. Si abrimos puertas al enemigo, toma control (v. 6 b)

2. Cuando hacemos pactos y acuerdos con el mundo (v.7)

            a. Es necesario examinar con quién hacemos negocios

            b. No podemos dejar de depender de Dios

3. Cuando lo santo lo entregamos al mundo (vv. 8, 9)

            a. Ministerio

            b. Proyectos

            c. Negocios

            d. Vida práctica

III. CUANDO MEZCLAMOS VIDA CRISTIANA CON RELIGIOSIDAD (vv.10-15)

1. Cuando fabricamos una religión de conveniencia (v.10, 11)

2. Cuando los ídolos ocupan en lugar de Dios (vv. 12, 13)

            a. Cuando desplazamos a Dios (vv.14, 15)

b. Cuando Dios no ocupa el primer lugar en nuestra vida

IV. CUANDO ACTUAMOS PARA AGRADAR A LOS DEMAS (vv. 16-18)

1. Cuando manipulamos las cosas de Dios (vv. 16, 17)

2. Cuando, para ser aceptados, renunciamos a nuestras convicciones (vv. 18)

Conclusión:

Nuestro distanciamiento de Dios y la resequedad espiritual que conllevan, no se producen de la noche a la mañana. Son el producto de un largo proceso en el que dejamos de orar, de meditar en Su Palabra, y de aplicar a nuestra existencia principios y valores que son esenciales para edificar una vida plena, de realización en el Señor. Sin embargo, hay esperanza. Es hora de volver por la senda antigua como dicen las Escrituras:  “Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma” (Jeremías 6:16). ¡Decídase por el Señor de nuevo en su vida!

© Fernando Alexis Jiménez

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